martes, 24 de abril de 2012

Pobrecitos dedos, parados en el filo de un ladrillo.


de eso
de lo que tú tanto sabes
no sé nada ni creo aprender
cada certeza ha ido marchitándote
hasta reducirte a esa serie de datos inútiles que repites
como si tuvieran alma
pero que por más que intentas perfumar con artificios solo huele a hueco

así
como tu convicción
porque una cosa es saber y otra cosa es sentir

el lenguaje no es tuyo
aunque lo nombres

las palabras sí son un instrumento que nos pertenece a todos
deben
pertenecernos a todos
aunque no sepamos más que lo poco que hemos visto
en los ojos de nuestros muertos.

soy ola en el movimiento de esta fauna
de este grupo de salvajes que quieren gritar sus letras aunque no tengan escuela
que van a escupir palabras con flemas
que van a desangrarse y van a escribir solo lo que sale de su entraña

la entraña
esa
de la que tanto escribes pero que tan poco conoces
porque no de tanto posar te vas a volver su sombra

2 comentarios:

  1. Qué fuerte. Sólo me queda la duda de si hablas con alguien más o con el "intimo enemigo".

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  2. jajajajaja ¡Valdemar! Habla uno siempre con todos, con uno mismo y con nadie... Gracias por todos tus comentarios y por pasar a leer, es muy valioso para mí...

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